jueves, 15 de julio de 2021


                                 COMO UN ICONO GRIEGO


Me gustaba comer todos los días en la terraza del mismo restaurante, en el puerto de Xora. Me llevaba hasta allí la atracción que sentía por la zona y su ambiente, el intenso bullicio de la gente charlando en idiomas dispares; con el brillo del mar alegrando mis ojos, ese fiel camarero que sabía adivinar la  comida a mi gusto, y la copa de vino, de un sabor especial, que alegraba mi sangre sin nublar los sentidos...

...Y aquel hombre.

Reparé en su presencia ya desde el primer día; se encontraba sentado en la parte derecha de la puerta de entrada; solitario, a su  alcance en su mesa una copa de ouzo, y sus ojos clavados en la luz del Egeo.

Yo me sentaba siempre un poco a su derecha, pero cercana a él, con la firme intención de poder observarle sin que fuera evidente.

Tenía el gesto ausente, como si no estuviera allí; enjuto, se adivinaba alto; la cabeza aureolada de un cabello muy blanco, coronada -a su vez- por una gorra oscura, que le daba ese aspecto  que pinta inconfundible a la gente de mar. En su cara morena, castigada de sol, había tantos surcos como millas cubiertas; cada línea de ellas relataba una historia que invitaba a volar.

Pero eran sus ojos los que hacían soñar; se mantenían fijos, a distancia insondable, como si fueran parte de una visión etérea; indiferentes, ajenos totalmente a presencias cercanas; sólo miraba al mar; pero eran tan intensos, tan bellos, tan profundos, que me hacían inventar cada día una fábula, ese mytho creado sobre tantas leyendas a través de los tiempos.                       

   Y pensaba en los dioses que crearon su historia; me atraía imaginar que su cuna fue Delos y que, siendo muy joven, él debía de tener el aspecto de Apolo, por sus rasgos, su porte y la luz que de él emanaba; es seguro también que su hermana Artemisa potenció que viviera ese amor que pervive más allá de los siglos, su locura por Dafne, a quien quizás aún mantuviera en su mente.

   Puede que me equivoque, y que fuera un pirata revestido de Hermes; y que, cada mañana cuando Eos despertaba, elevara sus velas y levara su ancla para así, transformado en feroz bucanero, adentrarse en las aguas para vencer bajeles, para salvar doncellas, y volver victorioso a rendir homenaje a la gran Anfitrite.

   ¿Y si acaso era Ares que, abrumado de penas, prefirió retirarse del dolor de la guerra y buscaba la paz, intentando olvidarse de la lucha, la sangre y hasta, incluso, de Enió?.

   ¿Quién sería aquel hombre? Pude haber indagado y encontrar la sorpresa de que sólo era el padre del gentil camarero; pero no quise hacerlo; preferí imaginar que cualquiera de aquellas fantasías que inventaba eran mucho más ciertas.

 

Como todo termina, un día me marché; me llevé en mi mochila una nueva experiencia, mis pupilas repletas de la inmensa belleza que lograron captar, un montón de recuerdos que brincaban felices dibujando el tostado que marcaba mi piel, y hasta alguno -tenaz- que llegara conmigo y que quise dejar en cualquier callejuela, se empeñó en regresar enganchado a mi mente.

 

    Y salté cinco mares para volver a la querencia de mi sueño. Ya no he vuelto a comer en el puerto de Xora, pero sigue en mis ojos ese brillo especial de la luz del Egeo que se mezcla, en fundidos, al azul de mi mar. Y, envolviéndolo todo, el recuerdo del hombre que logró despertar mi interés y mis sueños, sin que él fuera consciente  de que estaba a su lado.


                                                                               F.D.F.

 

 

 

 

*    DELOS – Pequeña isla del Archipiélago de Las Cícladas, en donde la leyenda sitúa el nacimiento de Apolo.

*   APOLO – Dios de la luz, la música y las bellas artes. Hijo de Zeus y Letona.

*   ARTEMISA – Diosa de la caza y de los animales. Hermana gemela de Apolo.

*   DAFNE – Ninfa, hija del dios-río Ladón. Rechazó a Apolo y se convirtió en laurel.

*   HERMES – Mensajero de los dioses. Hijo de Zeus y de la ninfa Maia.

*   EOS – Diosa de la aurora, hermana de Helios (el sol).

*   ANFITRITE – Reina del mar. Esposa de Poseidón.

*   ARES – Dios de la guerra. Hijo de Zeus y de Hera.

*   ENIÓ – Antigua diosa de la guerra, compañera de Ares.